Pregón de Navidad 2019
ENRIKE RUIZ DE GORDOA Y ALDA
“Una Navidad comprometida”

 

Profesor y antropólogo cultural, profesor y director del colegio Samaniego, director del departamento de cultura del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, creador musical y teatral, conferenciante, dinamizador cultural… Una larga trayectoria que hace que D. Enrike Ruiz de Gordoa no necesite presentación. Hoy toma la voz en la Iglesia del Carmen para pronunciar-cantar el XXXII Pregón de Navidad

 


Gabon! Lehenengo eta behin, mila esker hemen zaudetenei eta bereziki, Arabako Belentzaleen Elkarteari bere gonbidapenagatik.

Niretzat, plazer handia da hau egitea eta, batez ere, harrotasuna. Beraz, oso, oso pozik nago eta, nola ez! urduri samar.

Gracias a todas las personas que hoy habéis venido a este pregón de la Navidad 2019 y de modo muy especial, mi agradecimiento a la activa asociación cultural Belenistas de Álava por la invitación para poder compartir con todas vosotras y vosotros este singular momento.

La tarea que se me ha encomendado hoy es hacer la labor que realizaban los pregoneros, aquellas personas que se encargaban de anunciar y socializar las noticias, las advertencias, los momentos importantes de la comunidad o de recordar las tareas a las que, como colectividad, se comprometían sus miembros.  Por ello, hoy, este pregonero con su pregón no pretende hacer, nada más, que ser una llamada de atención para vivir y poder participar en una Navidad comprometida. Bai, Eguberri solidario eta alai batean.

Tuve la oportunidad de poder trabajar con uno de nuestros grandes músicos y una de las personas más generosas que he conocido: Luis Aramburu.

Entre sus muchas labores musicales, él también solía componer canciones para nuestro grupo Amets taldea y para el Coro Araba, y, cuando necesitaba de nuestra ayuda para otras labores musicales, tenía la libertad de pedir nuestra colaboración porque con él siempre estábamos dispuestos.

Luis Aramburu, junto a Jesús Guridi es uno de los mejores compositores que ha dado este Término Municipal de Vitoria-Gasteiz. Y fue, don Luis, como yo le llamaba, quién me pidió que yo le pusiera mi voz a la grabación de unas nuevas composiciones musicales navideñas que había hecho a partir de una idea y textos de otro gran gasteiztarra, Cayo Luis Vea-Murguia.

Era necesario grabar sus nuevas composiciones musicales en una cinta de casette (que alguien les explique a los más jóvenes qué era un casette) y hacer esa grabación para que las personas que iban a participar en esa especie de nacimiento viviente musical se las pudieran aprender.

Y en el coro de la parroquia de San Miguel, con su hijo Luis Mari Aramburu como técnico de grabación, Don Luis al órgano y yo a la voz, pusimos las bases musicales del “Cortejo Navideño” de Sarria del Valle de Zuia, y que cada día de Navidad, por la tarde y desde 1974, llena de fe, música, mensaje y emoción ese precioso rincón alavés. Se lo recomiendo vivamente a las personas que no lo conozcan y que la tarde del próximo día 25 de este mes de diciembre vayan a disfrutarlo a Sarria, localidad pegada a Murgia. Bai, benetan, merezi du. Gomendatzen dizuet!

Y es ahí, también en esa representación musical navideña, en ese nacimiento viviente donde cada una de nosotras y nosotros podemos descubrir al primer pregonero de la Navidad de hace más de dos mil años.

Fue ese ángel, ese mensajero (que es lo que significa la palabra ángel) quien pregonó, para las personas más humildes de Belén, concretamente a los pastores que cuidaban los rebaños de ovejas. Así suena esa canción de Luis Aramburu, “El anuncio del ángel”:

No temáis, os traigo una buena noticia,

una gran alegría que es para todo el pueblo:

os ha nacido en la ciudad de David

un Salvador que es el Mesías Señor.

Esto tendréis por señal:

encontraréis un niño envuelto en pañales

y reclinado en un pesebre.

¡Gloria a Dios en las alturas

y paz en la tierra a los hombres que ama el Señor! (bis)

Para mí, esta llamada del ángel fue el primigenio y el mejor PREGÓN que tuvo aquella Navidad y que sigue teniendo la mayor validez en todas las Navidades que han venido después, sobre todo, si todas las personas de buen corazón nos sentimos interpeladas.

Resulta enormemente difícil trasladar un mensaje tan emocionante y tan vital:

“No temáis, os traigo una buena noticia”: No tengáis miedo ante esta buena nueva, es lo mejor que os puedo trasladar, les trasmite el ángel pregonero

“…una gran alegría que es para todo el pueblo”: Y les traslada que ES la gran noticia y que lo es para TODO el pueblo, para todas las personas, sin distinción, para las personas de toda condición.

“Os ha nacido en la ciudad de David un Salvador que es el Mesías Señor”: La espera ya ha acabado, la incertidumbre que se estaba viviendo finaliza con la llegada del Mesías que la comunidad anhelaba.

“Encontraréis un niño envuelto en pañales y reclinado en un pesebre”

Y aquel ángel pregonero traslada a aquellos aturdidos pastores de Belén que no se sorprendan porque ese Mesías-Salvador, sea un niño que, envuelto en pañales, ha querido nacer pobre, sencillo, sin boatos ni oropeles, en un pesebre de un portal destartalado de Belén, en el único espacio que ha encontrado su familia migrante después de que les cerraran todas las puertas.

Por ello,

“¡Gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres que ama el Señor!”

Soy consciente de que hoy muchas personas piensan que el pregón de la Navidad sobra porque tenemos múltiples pregoneros interesados y que ya, desde hace meses, nos están bombardeando, por todos los medios, para que la Navidad festiva sea consumista. Eguberri batean, non dena erosi eta erostea den.

También estoy seguro de que todas las personas que estamos hoy aquí tenemos nuestra experiencia personal, nuestras vivencias de estos días que se nos avecinan, ¿verdad?

Quiero recordar y compartir con vosotras y vosotros, algunas de las experiencias de diferentes Navidades que han marcado mi experiencia vital:

  • Tuve la inmensa fortuna, junto a la gran pedagoga del Colegio Samaniego de Vitoria-Gasteiz, Ángeles Álvarez Ruiz de Viñaspre y con mi inolvidable Antxon Lete Ruiz de Azua, de vivir muchas navidades en las que nos acercábamos, durante todos los días de las vacaciones de Navidad-Reyes, con la Escolanía Samaniego y el Grupo de Teatro Infantil Samaniego, a residencias de mayores, a conventos de clausura, a centros de acogida, a pequeños pueblos de Álava… llevando un mensaje, desde la cultura y la educación, de lo que entendíamos que debería ser la Navidad, pensando en las personas más débiles.
  • No quiero olvidar aquellas navidades con su preparación, ensayos y conciertos de Navidad con el Coro Araba Abesbatza, poniendo en valor la música de navidad, antigua y contemporánea, haciendo que cada nota musical se convirtiera en una forma de socializar y de interpelar a cada corazón. Gabonetako mezu benetakoak eta konprometituak ziren.
  • En modo alguno puedo olvidar las navidades del año 1979, cuando unos días antes y con la nieve blanqueando ya nuestras calles, tuvimos, Mirari y yo, la llegada a nuestras vidas de nuestro hijo Ion Haritz. Esas primeras navidades con ellos las recuerdo como las más felices de mi vida.
  • Tengo todavía en mi retina cuando de niño vi el primer gran nacimiento en este convento del Carmen, un nacimiento con movimiento que me dejó totalmente fascinado, como lo sigue haciendo este nacimiento que cada año se coloca aquí, junto a este altar mayor o la Muestra de Belenes en su claustro, de la mano de la Asociación Belenista de Álava.

Y en estas vivencias que comparto con vosotras y vosotros, no quiero olvidarme del Nacimiento del Parque de La Florida, esa auténtica obra artística y de fe que, desde 1962, nos sigue sorprendiendo en el corazón de Vitoria-Gasteiz. Y tengo que reconocer que hay dos figuras que son mis preferidas: una, la del alfarero, una magnífica pieza tallada en madera por Aurelio Rivas, y la otra, esa figura gris que muchas personas no entienden que esté en ese parque porque no es la típica figura de Navidad, pero pretende que, entre tanto color y villancico, nos demos cuenta y reflexionemos de que existe otra Navidad que no vemos o no queremos ver. Es esa figura del que vive en la calle con ese eterno tetrabrik de vino, del desarraigado, del marginado. Una pieza creada en 1997 por José Manuel Hernández “Txaten” y que llamamos “la otra mirada de la Navidad”. Erreparatu diozue figura horri? Begietara begiratu al diote?

Y, entre otros muchos nacimientos que pueblan nuestra comunidad en estas fechas hay uno que tengo que reconocer que, como aitite, me hace disfrutar, porque con elementos de juego también se puede conmemorar y representar aquel Belén, hoy. Y es lo que hacen Aiala e Ibai montando el que instalan en su casa, construido con muñecos, escenografías y utilería de Playmovil. Ziur bikote honek familietan badutela baten bat. Ezta? Bai, zihur!

Como pregonero os quiero trasladar que lo bueno que tienen estas fechas es que hay mil formas de representar la llegada de Jesús de Nazaret a través de los nacimientos…

pero tiene que haber UNA ÚNICA FORMA DE VIVIR LA NAVIDAD si somos personas sensibles y empáticas y, si además somos cristianos convencidos, NO podemos olvidarnos del mensaje que, en estas fechas, de forma especial, debe estar presente: LA SOLIDARIDAD.

Por ello, también quiero compartir con vosotras y vosotros algo que, en una de aquellas navidades de los años 70 llegó a mis manos. Era el contenido de un texto que no venía firmado pero que contenía una serie de reflexiones sobre lo que es y no es una navidad y que quedó en mi memoria.

He intentado recordar aquel contenido y poder recomponer y reescribirlo para trasladaros, como pregonero, aquel mensaje que me dejó impactado y que creo que sigue teniendo una vigencia actual:

  • No será Navidad porque, para muchas personas que nos rodean, la noche sigue siendo muy oscura y aquella noche fue clara y hablaron de paz en la tierra.
  • No será Navidad si nosotros tenemos la cama caliente y ellos sienten frío en su soledad. Porque llaman a nuestras puertas y no se las abrimos. Porque sobran pisos y ellos no encuentran hogar.
  • No será Navidad, aunque en estas fechas nos llamemos hermanos al darnos la paz.
  • No será Navidad porque muchas personas están sin trabajo y nosotros lo sabemos.
  • No será Navidad mientras nosotros y nosotras vayamos por la misma senda, con los ojos cansados de tanto reír y otros rendidos de tanto llorar, sus maletas vacías y las nuestras a rebosar.
  • No será Navidad si NO has dado la capa a tu hermano, esa que te sobra, esa nada más.
  • No será Navidad, aunque juntemos a nuestra familia en torno a nuestra mesa y les hablemos del Niño Jesús, del portal…
  • No será Navidad, aunque escuchemos y cantemos villancicos y tengamos las copas prestas a brindar, o nos demos palmadas y abrazos de amigo y nos digamos: ¡Feliz Navidad!
  • Sí será Navidad cuando nazca en nuestra vida una estrella plena de fe y llena de paz y solidaridad.
  • Sí será Navidad cuando nos hagamos pueblo en vez de ciudad, y, en vez de palacio nos hagamos portal. Y nos veamos niños y niñas, olvidemos nuestra edad y, cual niños, nos hagamos sencillos y partamos nuestro pan con aquellos “otros” que caminan a nuestro lado por la misma senda y hacia el mismo lugar.
  • Sí será Navidad cuando sintamos hermano al hermano siguiendo el mensaje del viejo portal. Cuando pongamos a Dios en nuestra vida por delante de las cosas.
  • Sí será Navidad cuando NO demos importancia y prioridad a lo nuestro y sí a los demás.
  • Sí será Navidad si NO entendemos de razas, si a todos los hombres y mujeres les miramos y les tratamos igual.
  • Si… si nos hacemos pequeños de verdad, entonces… SÍ SERÁ NAVIDAD.

Tengo claro que hay personas que la Navidad no la llevan bien, que hay años en los que estas fechas nos resultan más duras, sobre todo, cuando notamos fuertemente la falta de personas que seguimos queriendo pero que ya no están con nosotros. A mí también me ha pasado. Pero… yo os invitaría a que, en estas Navidades que nos vienen, las ausencias las convirtamos en presencias.

Permitidme que, como pregonero, os invite e incite a que, en estas Navidades, de forma especial, empaticemos con “los otros”, con “los nadie”, con las personas más desfavorecidas y a poner en funcionamiento la neurona espejo, LA SOLIDARIDAD de verdad. Gonbidatzen zaituztet jaiotzaren irudi bakoitzean jar gaitezen, beste Gabonak bizitzeko.

Os invito a volver a ilusionarnos y a comprometernos (o a seguir comprometidos) con el espíritu de la Navidad durante TODOS LOS DÍAS DEL AÑO porque necesitamos apostar por una ETERNA NAVIDAD.

Os invito a que dejemos de encerrarnos en nosotros mismos, a parar la nostalgia si es triste y además nos hace daño.  La soledad, si no es buscada intencionadamente y resulta placentera, esa soledad será siempre un vacío difícil de llenar.

Permitidme, amigas y amigos, que como pregonero os invite a que en estas Navidades 2019 no tengamos que buscar la felicidad porque todas las personas de bien tenemos la obligación de CREAR LA FELICIDAD para todas nosotras, para todas las personas que nos rodean en nuestra cercanía, pero, sobre todo, insisto, para las personas más débiles, para esos “otros”, para “los nadie”, para “las personas invisibles”.

Quiero pregonar que la Navidad no puede ser algo gaseoso que se evapora en estas fechas coloristas sin asentarse en nuestro compromiso que, como personas, debemos tener y como seguidores de Jesús de Nazaret, con mucha más razón.

Tenemos la obligación de mirar por encima de nuestro corto horizonte y recordar que Jesús de Nazaret, desde que nació en aquella Navidad de hace dos mil años, fue un eterno migrante.

Y ya finalizando, por favor, permitidme que os pida dos cosas que seguro que hacéis:

– una, que disfrutéis en familia de la espectacular RUTA DE LOS BELENES a lo largo y ancho de este Término Municipal de Vitoria-Gasteiz y de nuestro Territorio Histórico de Araba/Álava.

– y la segunda, que en estas Navidades CANTEMOS. Sí, que cantemos en familia, que cantemos en ikastolas y colegios, que cantemos porque es una forma de pregonar, de llamar a cada corazón. ¡¡¡Toc, toc, toc!!! CANTEMOS canciones de Navidad, porque cantar, compartir notas musicales nos ayudará a crear y ser comunidad (con unidad). Abestu ditzagun Gabon kantak, lehenengoak, oraingoak, berdin dio! Kantatzeak talde, komunitate egiten gaituelako. Horrela, adibidez:

Dena ilunpean dago gabean, gabean,

elurtia mantso-mantso zerutik lurrera, gabon, gabon.

Zazpi aingerutxu datoz etxera, etxera,

esnatu zaitezte danok, gau erdian gara, gabon, gabon   

Hiru errege, artzaitxo pilo bat

Belengo gau zurian,

Aita San Jose, ama Maria

eta haur jaio berria.

Gora Jainkoa zeru zabalean

ta pakea lurrean,

Zuek eta gu, gaurtik aurrera

ondo maitatzen bagera.

Gaur kanta kantari jator umea, umea,

danbolinarekin datoz Belengo bidean gabon, gabon.

Txintxarri guztiak, din don, airean, airean,

argia piztu zain dago, lurbide galdua, gabon, gabon.

 Hiru errege, artzaitxo pilo bat…

Eta bukatzeko, zuen arreta, hurbiltasuna eta konpromisoa eskertzea besterik ez zait geratzen. Mi agradecimiento especial para Elías Fernando López de Luzuriaga, este gran músico con el que he compartido muchos años de música y que hoy me ha acompañado en este pregón. Eskerrik asko!

Y este pregonero ya se retira para que todas y cada una de las personas que estáis hoy aquí, OS CONVIRTÁIS EN LOS PREGONEROS Y PREGONERAS en vuestras familias, en la cuadrilla de amigos, en los lugares de trabajo o estudios.

SEAMOS pregoneras y pregoneros con el ejemplo de lo que es y debe ser la NAVIDAD, LA ETERNA NAVIDAD LOS 365 DÍAS DEL AÑO:

  • COMPROMISO CON LAS PERSONAS MÁS NECESITADAS
  • Y COMPROMISO CON EL PLANETA Y CON EL CLIMA.

Solo así podremos decir con total fidelidad: ¡FELIZ NAVIDAD!  EGUBERRIO ON!

Mila esker, bihotz-bihotzetik!!!

Enrike Ruiz de Gordoa y Alda
Navidades 2019