Pregón de Navidad 2011
JAVIER CAMENO ORTIZ DE ZÁRATE
“Un toque de atención a la pérdida de valores”

 

La Parroquia de Nuestra Señora de los Desamparados acoge hoy, 16 de diciembre, el Pregón de Navidad de este año 2011. Y si varios han sido los “celedones de oro” que han pasado por este encargo de anunciar la Navidad, hoy es D. Javier Cameno, presidente de los Celedones de Oro, el premio popular más importante de la ciudad, quien asume esta tarea. Habituado a los micrófonos por su extensa trayectoria en el periodismo así como en el ámbito de la cultura y el deporte, nos llevara a recordar con él las navidades de su vida.


“A las seis y media de la tarde del lunes 24 de diciembre de 1962 se inauguró el Belén de la Florida.

Había nevado y hacía un frío intenso, de 21 grados bajo cero, según los datos del antiguo aeropuerto de Vitoria. En la Modelo de Arkaute se registraron 23 bajo cero.

Con este panorama puramente invernal, el Obispo Francisco Peralta Ballabriga fue breve en su bendición, ante la presencia del Alcalde Luis Ibarra Landete, el Presidente de la Comisión de Festejos Javier Vera-Fajardo y los promotores de la idea.

Por lo tanto, en la próxima Nochebuena, dentro de 8 días, el Belén de la Florida cumple 50 años de su inauguración, que es tanto como decir sus “Bodas de Oro”.

Ustedes entenderán que arrime el ascua a mi sardina, porque el “Celedón de Oro” se creó también el mismo año: 1962.

Y dos de los máximos impulsores de aquel Belén son “Celedones de Oro”: Julián Ortiz de Viñaspre “Jovi” y Luis Mari Sánchez Iñigo. Pero no sólo eso, sino que también en 1962 se creó la Coral “Manuel Iradier”, que asimismo es “Celedón de Oro”, al igual que su Director, Emilio Ipinza. Precisamente, la Coral entonó el “Venite adoremus” en la gélida noche del hisopazo episcopal.

Consultando datos sobre la efemérides, he visto que las fotos de la inauguración eran de otros dos “Celedones de Oro”: Goyo Querejazu y Fede Arocena, que trabajaron siempre bajo la firma ARQUÉ.

Y rizando más el rizo, me han precedido en este pregón mis compañeros “Celedones”: Luis Mari Sánchez Iñigo, Cayo Luis Vea-Murguía, Sabin Salaberri, Emilio Ipinza, Ricardo Sáez de Heredia y Luis López de Sosoaga.

Para completar este acto cantará el coro de la Escuela de Música que lleva el nombre de otro “Celedón de Oro”: Luis Aramburu. Precisamente él puso la música al Cortejo navideño de Sarría, obra de Cayo Luis, y que desde 1974 se celebra todos los 25 de diciembre, a las 6:30 de la tarde.

Cuando me encargaron este acto pregunté “¿Sobre qué tengo que hablar?”. Me dijeron “Sobre tus experiencias navideñas”.

En mi vida hay 4 Navidades ó 4 épocas distintas de la Navidad.

La primera de ellas, la de mi niñez, es muy triste. Me explico. Yo soy hijo único y mi padre era sereno. Eso significaba que tanto el 24 como el 31 de diciembre, de todos los años, mi padre se iba de casa a las 9:30 de la noche. Allí nos quedábamos solicos mi madre y yo, porque mi familia paterna vivía en Argentina y la materna en el pueblo alavés de Santurde.

Naturalmente en aquella época no había televisión. Sólo la maravillosa compañía de la radio. No sé si allí nació mi vocación radiofónica posterior.

La segunda época fue precisamente la de la radio, la de Radio Vitoria, en la que voluntariamente me ofrecía en las Nochebuenas y Nocheviejas para ir a la emisora y micrófono en ristre, por medio de la música, llevar la felicidad a los hogares alaveses y en particular a aquellas personas que más la necesitaban por diversas causas: soledad, recuerdo de los seres queridos ausentes, enfermedad, cárcel, paro, inmigrantes, trabajo…

Precisamente por ello, por el trabajo de mi padre, yo he tenido siempre una sensibilidad especial hacia aquellas personas que en esos días tan señalados no han podido disfrutar como los demás.

La tercera etapa, en los años 70 y 80, tiene una doble vertiente.

Por un lado, desde mi puesto de Consejero Social del Deportivo Alavés, puse en marcha la campaña de juguetes para los niños de Camerún, en el partido previo a la Navidad. Esta realización mereció la atención de televisiones, periódicos nacionales y, por supuesto, de los medios informativos locales. Posteriormente fue copiada por algunos equipos de campanillas.

Asimismo las visitas de los jugadores del Glorioso a los niños de los Hospitales de Santiago y Txagorritxu. También la visita a los presos de Nanclares. En ambos casos portando regalos alusivos al Club.

Y un acto entrañable en la noche del 24 de Diciembre, la espléndida cena a los 130 acogidos en las Hermanitas de los Pobres. Allí acudía toda la Directiva, encabezada por Gonzalo Antón, y otras personas cercanas al Club, para desde las 6 de la tarde, empezar a limpiar gambas y langostinos. Naturalmente servíamos toda la cena y llegábamos a nuestras casas, a media noche, pero con una gran satisfacción interior. No puedo ocultar también que, más de un año, con tristeza al encontrarnos con personas conocidas de Vitoria y por circunstancias de la vida, les habíamos servido la cena.

Y toda esta faceta deportiva coincide unos años y se complementa en otros con los coros internacionales que, en la época navideña, traje por Álava y por otros lugares. Ello suponía mi ausencia, en más de una ocasión, con los míos en las fechas en las que se pregona la unidad familiar, pero mis invitados también tenían sus familias, y a muchísimos más kilómetros que la mía, además de sus corazoncitos y necesitaban mi presencia.

La cuarta fase de mi Navidad es la actual, la de abuelo, en la que preparo todos los años el Belén en casa, con ilusión renovada, pensando en mis tres nietos.

Desde muy pequeñitos, en la mañana del 25 de diciembre les he llevado a visitar los Belenes de la Iglesia del Carmen y los del claustro conventual de la misma, hechos por la Asociación Belenista de Álava, que son una muestra artística y visual con miniaturas y perspectivas inverosímiles que hacen las delicias de los peques y proclaman la admiración de los mayores.

Del Carmen pasamos a la vecina Florida y allí nos seguimos deleitando con el Belén más grande del mundo. Este recorrido es anual y también hemos visitado el Napolitano, en el Museo de Arte Sacro que se halla en la Catedral nueva.

En una distancia muy corta y en el corazón de la ciudad, disfrutamos en Vitoria-Gasteiz de una joya belenística única.

Las circunstancias de mi vida, como ha quedado reflejado, han hecho evolucionar mi forma externa de vivir la Navidad, pero como creyente que soy siempre he tenido un sentido religioso del nacimiento del Niño Dios.

Hoy contrasta la humildad y sencillez de aquel portal de Belén con las luces y mercadeo en que nuestra Sociedad ha convertido el anuncio de la Buena Nueva.

La entrañable época de la Navidad supone un toque de atención a la pérdida de valores que nos está invadiendo.

Menos mal que mientras existan artistas como los componentes de la Asociación Belenista de Álava tenemos asegurado el futuro del misterio de la llegada del Niño Jesús a la Tierra. Un futuro que pasa por los miles de escolares que participan anualmente en el concurso de Belenes que convoca la Asociación de Álava.

Es la semilla que dejaron Julián Ortiz de Viñaspre, Ángel Quintana, José María Díaz de Otazu y Luis Mari Sánchez Iñigo cuando hace 50 años pusieron en marcha un original Belén, de tamaño natural y aprovechando la gruta de La Florida con Jesús, Maria y José, acompañados de pastores y del Ángel anunciador. Aquello es hoy un Belén maravilloso, único, singular y monumental, con los Reyes Magos, pastores, leñadores, panaderos, herreros, carnicero, pescador, lavandera, alfarero y un sin fin de animales de corral, ambientado todo ello por villancicos, graznidos, mugidos y balidos, con una iluminación apropiada a todo el entorno. Por ello en 1992 la Federación Española de Belenistas entregó el primer premio al Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, que es el propietario de esa joya que forma parte indisoluble del paisaje gasteiztarra en Navidad.

Luis Mari, ex-Presidente de la Asociación alavesa y premiado con el Trofeo de la Federación Española de Belenistas, sigue en la brecha con sus 84 años.

También merecen una mención especial el Padre carmelita Juan Cruz Apodaca y Pedro Pablo González Mecolay como impulsores, en distintas décadas, del auge que tiene hoy el Belenismo en Álava, habiendo recogido el testigo Iñigo Bastida que, además de ser el Presidente de la Asociación de Álava, lo es de la Federación Española de Belenistas.

Esas más de 30.000 personas que todos los años visitan los Belenes de los Carmelitas, más los que lo hacen en el de la Florida, en las parroquias vitorianas y alavesas y en nuestros hogares hacen que mantengamos viva la llama de la fe, de la ilusión y del espíritu navideño.

Que este pregón tenga lugar esta noche en esta Parroquia de Nuestra Señora de los Desamparados es precisamente porque cumple 50 años, sus “Bodas de Oro”. Y como ya ha quedado dicho, el próximo día 24 se cumplen las 50 puestas ó colocaciones del Belén de la Florida.

Y hablando de “Bodas de Oro” ahí estamos los “Celedones de Oro”, habiendo sido el primer galardón para el Casino Artista Vitoriano y para Manuel Benítez “El Cordobés” en 1962.

Otras “Bodas de Oro” ó 50 años que se cumplen el próximo año son:

Enero: En la rifa de San Antón figura por primera vez un automóvil.

Febrero: La Corporación Municipal acordaba por unanimidad no trasladar al monte de Júndiz el monumento a la Batalla de Vitoria, por considerar que la Plaza de la Virgen Blanca era el lugar idóneo.

Marzo: Vitoria vivió unas intensas jornadas religiosas durante 15 días, con motivo de la Misión General de la Diócesis. Debuta la Tuna Universitaria de Vitoria-Gasteiz.

Abril: Día 27, con motivo del Centenario de la Diócesis, se traen desde la Catedral de Santa María la Redonda, de Logroño, los restos de San Prudencio. La arqueta se depositó en el Palacio de la Diputación Foral de Álava, siendo trasladada al día siguiente a la Catedral de Santa María donde, tras una solemne Misa pontifical, fue trasladada nuevamente a Logroño. Día 28, festividad de San Prudencio, se cumplen 100 años de la creación de la Diócesis de Vitoria. Debuta el equipo ciclista del Deportivo Alavés. Fallece el vitoriano Heraclio Alfaro Fournier, que en 1913 había construido el primer aeroplano hecho en España. También muere Julián Apraiz Arias, arquitecto de la Catedral nueva. Se construye la iglesia de San José, en Arana.

Mayo: Por primera vez en Vitoria se juega la final del Campeonato nacional manomanista de Pelota entre profesionales, venciendo Azcárate por 22-21 a García Ariño. Naturalmente fue en el Frontón Vitoriano. Se acuerda la municipalización del servicio de transportes urbanos.

Junio: Fallece repentinamente el popular practicante vitoriano Pepe Sedano, fundador y presidente de la Peña Taurina Vitoriana, y padre de José Mari, única persona viva que tiene dos “Celedones de Oro”.

Julio: Comienzan los trabajos para la construcción de la Central Lechera Alavesa, frente al parador “Alas”. Permaneció unas horas en la ciudad el famoso artista cinematográfico Charlton Heston. En la Plaza de España se representa “El Caserío”, interpretada por 600 voces, y en homenaje póstumo al vitoriano Jesús Guridi, que había fallecido el año anterior.

Agosto: Se inauguran las instalaciones de la “playa” de Gamarra y la parroquia de San Pablo en Ariznabarra. El Embajador de USA en la ONU asiste a las Fiestas de la Virgen Blanca.

Septiembre: 2.500 cursillistas asisten a la clausura del 50 Cursillo de Cristiandad de la Diócesis de Vitoria.

Octubre: 20 bodas conjuntas se celebran el día del Pilar, en la recién inaugurada Parroquia de Ariznabarra. Un gigantesco convoy, con 168.000 kgs de carga hizo que el Ayuntamiento tuviera que rebajar el nivel del pavimento para que pudiera pasar bajo el puente del ferrocarril en el Portal de Castilla.

Noviembre: Por la Alcaldía se anunciaba la compra de terrenos para la construcción de una gran fábrica en la afueras de la ciudad: la empresa francesa de neumáticos Michelín. Las Cajas de Ahorros Municipal de Vitoria y Provincial de Álava adquieren un inmueble en Bilbao para sede de la Casa de Álava en la Capital vizcaína.

Diciembre: Era aprobado el proyecto para la construcción de varios chalets en el cerro de Estíbaliz.

Tras estas efemérides, mi gratitud a quienes me han concedido el honor de pregonar la Navidad.

Gloria in excelsis Deo.

Gloria a Dios en el cielo.

Aintza Jainkoari Keruan.

Et in Terra, Pax hominibus bonae voluntatis.

Y en la Tierra, Paz a los hombres de buena voluntad.

Eta Lurrean Bakea, borondate oneko gizon-emakumeentzat.

La Navidad se representa siempre con un ángel que baja del cielo para anunciarnos que ha nacido El Salvador. También en Vitoria “la alegría baja del cielo”, slogan que se debe al “Celedón de Oro”, Cayo Luis Vea-Murguía.

En ambos casos, María está allí. Por un lado, en la gruta del Belén de la Florida. Y muy cerca, en su hornacina desde donde preside la vida de la ciudad, junto a Celedón, en la jornada más festiva del año, el 4 de agosto, a las 6 de la tarde.

Que esa alegría celestial y celedoniana reinen estos días en los hogares vitorianos.

Y para el 2012 pedimos “Trabajo para todos”.

Eskerrik asko etortzeagatik.

Gracias por vuestra asistencia.”

Javier Cameno González de Zárate
Navidades 2011